Inés&Raúl: Agujeros negros(5ªParte)

lunes, marzo 30, 2009 Laura.S-P 2 Comments

Lo primero quería pedir perdon a aquellos que siguen el diario por tardar tanto en actualizar, pero es que no me sentía con ganas de continuar y ha sido gracias a un comentario anónimo en la parte anterior que he decidido seguír. Asi que quería agradecerselo por animarme y no se me ha ocurrido una manera mejor que ponerme a escribir^^. Espero que os guste^^

Han pasado más de dos semanas desde la discusión con Raúl y seguimos sin hablarnos. Tampoco nos miramos, cuando nos cruzamos es como si no nos conociéramos. Al principio me molestaba que me ignorara de esa manera, e incluso trataba de sonreír al cruzarnos, pero sus miradas frías me hacían hervir la sangre. Orgullos, prepotente, se creía con derecho a juzgarme. Así que dejé de intentar ser amable. La cosa no hubiera tenido mayor importancia para mi, sino fuera por que tenía que aguantar a Eva todos los días, restregándome lo encantador, divertido y guapo que era. Me hacía hervir la sangre y necesitaba mucho auto control para no levantarme y ahogarla con mis propias manos. Entró tarareando en clase con su sonrisa de “soy mejor que tú” estampada en la cara:

  • Buenas, ¿qué tal?- mi tono era encantador pero mi sonrisa decía “piérdete”

  • ¡Holaa!- canturreó al sentarse- Oh tía acabo de recibir un mensaje de Raúl- empieza la primera ronda del combate.

  • ¿Ah si?no sabía que era de esos, siempre parece tan autista, tan metido en su mundo-

  • Nada, no creas, el otro día me acompaño a casa y fue la mar de cariñoso- se sonroja un poco, será teatrera...- Incluso me dio un besito de despedida muy tierno- deja caer las pestañas pero veo su mirada envenenada


Eso me ha sentado como un puñetazo en el estómago, y no debería pero me recompongo y sigo escuchándola buscando un punto por donde contraatacar:


  • Si, dice que se acuerda mucho de mi, de cuando eramos pequeños- sonríe y me mira con picardía- de ti dice que apenas se acuerda, solo de la anécdota del tobogán- KO total.


No me ha dado tiempo a defenderme ha ido hacía mi punto débil y me ha destrozado. No quiero seguir oyéndola, así que en cuanto Victoria y Sonia entran en clase me levanto para saludarlas. Traen noticias interesantes, habrá un botellón está tarde. Sonrío y hago como que estoy interesada, pero las palabras de Eva siguen vibrando en mi cabeza. No quiero pensar en ello, quizás beber me ayude a no pensar.


***


No tenía que haber venido al botellón, estoy bebiendo demasiado. Hay mucho ruido a mi alrededor, mucha gente, casi toda mi clase y mucha otra gente que no conozco. Le doy otro trago a la botella de JB. Ya llevo más de la mitad. Todo el mundo parece estarse divirtiendo, pero yo no. Cuando he llegado todavía estaba enfadada por lo de esta mañana y he cogido una botella, pensando que el alcohol ahogaría mis penas, y al principio no ha ido mal, hasta que ha llegado Eva. Ha llegado colgada del brazo de Raúl, y hablando con Javi, mi ex. Sé que lo ha traído aquí aposta, para restregarme lo sola que estoy ahora mismo. Es una bruja. Ahora mismo no soy capaz de pensar con claridad, el mundo parece tambalearse, inseguro, como mis pisadas. Consigo llegar hasta una esquina y me siento allí sola. Sonia y Victoria, están por ahí riéndose y disfrutando. Son estúpidas, no saben nada, no entienden nada, tan comunes, tan vulgares...Alguien se sienta a mi lado. También lleva una botella en la mano. Levanto la mirada pesadamente para verle. Debo estar más borracha de lo que pensaba. Raúl está sentado a mi lado, alza la botella y le da un buen trago, me mira fijamente. Tampoco parece muy feliz. Se acerca a mi cada vez más, hasta que tengo su cara a pocos centímetro de la mía. Le miro a los ojos. Le brillan mucho. El beso sale solo.

Cuando nos separamos noto que me arden las mejillas, pero el permanece serio. Cuando habla por fin lo hace despacio, poco a poco:


  • sabía que sería así-

  • ¿Cómo?- la nube de alcohol en mi cabeza se despeja un poco

  • No he sentido nada, absolutamente nada- le da un trago a su botella- cuando te vi en el tren coqueteando con ese tío, me enfadé mucho y luego pensé que quizás todavía sentía algo por ti- se ríe- pero es absurdo- su mirada ha vuelto a ser dura- eres una niñata malcriada, no me gustaría nada colarme por ti-


Una a una sus palabras me atraviesan el pecho. Me duele tanto que tengo ganas de llorar. “Nunca llores si no vas a conseguir algo a cambio” las palabras de mi madre me hacen tragarme las lagrimas. No le digo nada, me levanto y me voy. Desde ahora él para mi no existe. Todo lo que paso de pequeños no importa. Jamás volveré a pensar en él. Me despido de la gente con una sonrisa. Pongo una excusa cualquiera. Sonia me ruega que me quede pero yo le digo que tengo que irme. Me alejo con la cabeza bien alta y pisando fuerte. Por el rabillo del ojo veo que Eva se sienta al lado de Raúl, justo donde estaba yo. Parece que se están besando. Espero que les vaya bien. Cuando tuerzo la esquina y compruebo que nadie me ve, echo a correr. Corro tan rápido como me lo permiten mis piernas y el alcohol. Llego a mi casa asfixiada, sudorosa y jadeante. Mi madre me espera en el salón. Me mira de arriba a abajo cuando entro y levanta una ceja con desaprobación:


  • Inés, ven aquí, siéntate-


Continuará

2 comentarios:

  1. Voy a tener que ponerme al día en serio con el diario, me gustan las cosas escritas así. ^^

    La foto de la entrada anterior... de qué me sonará? Menudo artista.



    Besos :)

    ResponderEliminar
  2. Sigue escribiendo porque lo haces bien. A mí me parece muy difícil escribir una historia en primera persona, y tú lo haces con mucha naturalidad. Y momentos de bajón los tenemos todos. Estoy escribiendo mi cuarta novela y aún me siento insegura.
    En mi blog hay un premio para ti.
    Saludos desde La ventana de los sueños, blog literario.

    ResponderEliminar

Los comentarios me animan mucho a seguir escribiendo, asi que, si os gusta, comentad^^