Arena y nieve

martes, febrero 19, 2013 Unknown 0 Comments

La nieve, la arena,
se mezclan en mis dedos,
fría y suave,
como la caricia muerta.

Huele a hierba fresca,
a salitre y a brea.
Canta la mar en mis oídos,
una sirena,
Se enrolla mi tiempo
como el hilo de una cometa,
que un niño dejó volar

A lo lejos se perfila,
un paisaje agreste,
inmisericorde
Altivos acantilados arañan
la determinación del Atlántico
y doblegan a engreídas olas

En este lugar sagrado,
que me vió nacer,
crecer, amar y reir,
donde tantas tardes caminé,
dejaré que la marea
borre mis huellas en la arena
Acunará el mar mi presencia
pero la olvidará la tierra

Serán para siempre
los peces mis guardianes,
un oscuro lecho de algas
mis ropas
Y así, como ceniza,
a la playa de mi vida
me entrego

Que el viento me lleve
que el mar me acoja
que sea para siempre
blanca espuma de ola